miércoles, 27 de febrero de 2013

Nueva maceta para la Madreselva "El arcángel bicéfalo"

Hola amigos,
 
de nuevo con vosotros para mostraros el estado actual de la Madreselva que ya conocéis de entradas anteriores, regalo de mi amigo Rosendo, y al que otro amigo, Mario, le ha dado nombre: "El arcángel bicéfalo". Las entradas anteriores las podéis consultar picando en la etiqueta "Madreselva".
 




Para los más vagos aquí os pongo una retrospectiva de los trabajos anteriores.
 
Si os habéis dado cuenta, los dos troncos que crecían muy apretaditos terminaron separándose. A ello contribuyó el que la madera interior se fuese pudriendo, lo que me permitió separar en dos desde la base este padre e hijo. El saneamiento de la madera deparó muchas sorpresas, como termitas aún viviendo en el tronco y una familia de iulidos, milpiés para los amigos.
 
En la fase final de este último trabajo colaboraron mis alumnos del proyecto integrado "La botánica aplicada al cultivo del bonsái" del IES Pedro Muñoz Seca, y sirvió para que practicaran con el alambrado. No lo hicieron nada mal, aunque tuve que estar muy encima de ellos para que fueran cuidadosos con las yemas que estaban comenzando a abrir. El modelado final fue cosa mía, y como siempre me pasa con este ejemplar, nunca me decido con el frente. Este es el que más me gusta, pero la plantación tras el trasplante es la de la fotografía inferior, así que hasta el próximo trasplante tendrá que crecer revirado. No hay problema.


Todo fue a causa de quererle cambiar el frente por la espalda. Se trata de otro de esos bonsáis que se diseñan pensando en la ambivalencia. El que había elegido se aproxima mucho a esta imagen inferior, pero finalmente volví a quedarme con el frente original, y ese es el problema.
 Aunque hay muchos más, todos con las correcciones oportunas de las ramas. Estos dos son otro ejemplo. ¡Tendría que haber comprado una maceta sin muescas!. Je, je. Por cierto, la compré a través de la página Bonsaisuport, que gestiona Ferran Vives, junto con una maceta original de su hermano, Carles. Buen servicio, rápido y eficaz.


Y ahora, al ver la serie de fotografías que le hice al árbol, ¡también me gusta este frente por el tachiagari!. Es que no tengo remedio.
 
Algunos detalles del mismo. Podréis apreciar los dos truquillos a los que tuve que recurrir, pero os tenéis que fijar vosotros, yo no digo nada más.


El alambrado de mis alumnos no está nada mal:






Un saludo.

Juan Antonio Pérez.



martes, 19 de febrero de 2013

¿Como dar movimiento a un tronco recto?: El "Iniesto".

 Hola amigos.
 
Tras un descanso vuelvo al blog, ahora para mostraros como intentar dar movimiento "virtual" a un tronco recto de ullastre.
 
Este ejemplar me lo proporcionó también mi amigo Erasmo, y me atrajo su corteza y el uro frontal. Inconveniente, que tenía un tronco muy recto, con una pequeña curvita a medio camino del ápice, pero nada atractivo.


 
En un primer momento intenté buscarle un diseño tal y como venía plantado en la maceta de cultivo, pero no me terminaba de convencer. Aquí os muestro algunas imágenes antes del primer modelado y dos diseños virtuales que hice entonces en base al primer trabajo.







Podría haber funcionado, pero no se por qué, en mi colección hay pocos árboles en estilo vertical, tiendo siempre a darle movimiento a mis diseños y termino buscando curvas donde no las hay. En este caso pensé que ampliando el uro podría conseguir un movimiento virtual, y que cambiando el ángulo de plantado podría buscar movimiento donde antes no lo había:
 

 Seguía teniendo un problema con el nacimiento de las primeras ramas, muy grueso para bajarlo, así que fui sustituyendo las mismas por nuevos brotes, mas fácilmente modelables:


Y mira por donde, al poco tiempo de trasplantarlo a un tiesto menos profundo que favoreciera el desarrollo horizontal de las raíces, brotó por la parte derecha y me dio la idea de cambiar el movimiento general del diseño hacia el lado contrario al que tenía hasta el momento:
 
 Ya solo quedaba ir engordando la rama, pero a la vez ir dándole movimiento. Lo mas difícil, y que se conseguiría con el tiempo, era dirigir el ápice en la dirección de la rama principal.


Y llegamos a este mes de enero, y al quedar libre la maceta del Jorobao, pensé que maduraría mejor en ella y lo vestiría algo más. A veces hay árboles a los que los cambio mucho de maceta, pero hay que jugar con las cartas que se tienen y no todos disponemos de una buena colección de macetas que poder utilizar.


Si os habéis fijado, el uro se siguió trabajando y profundizando en la base, y se comunicó con un hueco que había en la espalda. Lo primero que hice fue sanear la superficie del sustrato y eliminar de raíz las indeseadas malas hierbas. Algunas son muy pertinaces. El musgo se reserva, y además está con los esporofitos, fuente de nuevos plantones de musgo.

 Un poco de polisulfuro para proteger. El uro llega ahora hasta la cicatriz del corte inicial de la recuperación, perfectamente plano, y lógicamente es más vulnerable a la podredumbre. El sistema radical estaba muy bien desarrollado y el colocarlo en el nuevo tiesto no supuso ningún problema tras una ligera poda del exterior del cepellón. Ahora estaba preparado para su desfoliado y nuevo alambrado. Otras veces desfolio y modelo y luego trasplanto, pero en esta ocasión quería marcar bien la posición del tronco antes de modelar.
Y el resultado del último modelado. El ápice comienza a desplazarse hacia la derecha, pero aún le queda un largo camino. Otro truco visual fue ocultar bajando una rama el defecto de la parte final del tronco que se une con la rama del ápice. Este irá disimulándose al ir engordando la misma, pero de momento lo taparemos con vegetación:


 Y la foto final sobre una mesita de Rosendo Martínez. Creo que he conseguido dar mas sensación de movimiento, al menos visualmente. Ahora a centrarse en densificar y seguir engordando sobre todo la rama principal.
Y eso es todo.

Un saludo.

Juan Antonio Pérez.

domingo, 20 de enero de 2013

Ullastre NINO. ¿QUE HAGO YO CON ESTO?

Hola amigos.
 
Esta entrada va dedicada a una persona que no supo ver el potencial que encerraba este pequeño ullastre. El sabe que tuvo las puertas de mi casa abiertas y por una falta de tacto, de vista y de confianza ya no las tiene. En una ocasión, y sin tener por qué, le ofrecí este ullastre como compensación a una planta que me había comprado y que se me secó tras fallar el riego automático, sin embargo, sus palabras al verlo fueron: ¿Y qué hago yo con esto?. Si la amistad hubiera seguido yo le habría guiado hasta formar un magnífico shohín con este yamadori, lleno de potencial, como bien sabe Nino, un amigo valenciano al que se lo compré en una quedada de Bonsaisur.
 
Las primeras imágenes que os muestro de él corresponden a noviembre de 2009, justo tras traerlo de Málaga y con los primeros crecimientos tras su recuperación:
 
 

Esta vista que os muestro a continuación es la que me atrajo del árbol y el frente elegido por su primer propietario, Nino. Nos muestra un tachiagari muy atractivo, un movimiento de tronco muy marcado y una corteza muy vieja que se puede ver desde el frente. Además, un shari natural con madera muy vieja y craquelada. Creo que hice una buena compra, ya que me costó 180 euros, y aunque había que pulir muchos defectos de la parte superior, el potencial era enorme. Cuando lo ofrecí con todo mi corazón me estaba desprendiendo de un proyecto interesante en el que trabajar y creo que compensaba de sobra la planta perdida, que por otra parte la vendí tirada de precio para el trabajo que le hice, casi pareja al coste invertido.



 
Por aquí se veían zonas muy bastas que había que sanear:
 
El primer defecto a eliminar o disimular era el tocón resultante de la poda de una rama gruesa:
 Un poco de tenaza parte-troncos y se disimulaba un poco. Eliminé madera de la parte posterior, menos envejecida, dejando la delantera, más natural:
 








 

 
Los restos del trabajo y las herramientas empleadas.
 
El segundo defecto a eliminar era la sensación de T invertida en el tachiagari, sin perder la calidad de la madera y la corteza craquelada:

 


Un cambio en la posición de plantado mejora la base y permite hacer un primer esbozo para el diseño del ullastre. Un Moyogi con una curva muy marcada. Problema, no había ramas bajas y sobraba la madera muerta del ápice, "ceporrúa" y poco sincronizada con el resto del árbol. Era una lástima eliminar estos jines naturales, así que pensé en acodar ese tramo para hacer un mame, que después os mostraré.

Por suerte el acebuche brota muy bien de forma natural, ya que es un arbusto y la dominancia es basal. Esto es un inconveniente cuando la planta está formada, pues emite continuamente chupones, pero una ventaja si nos hace falta una rama para diseñar. Era el 18 de febrero de 2010 y los ullastres comenzaban a crecer con fuerza:
 
Separado ya el acodo aéreo, que emitió raíces en un par de meses, y con los crecimientos bien alargados, interesaba ir modelando los mismos antes de que engrosaran más. Trabajo realizado en julio de ese año. 
Modelado de ramas, poda y defoliado para ir forzando la aparición de ramificación secundaria:

Tras un año en mis manos el ullastre comenzaba a mostrar otra imagen, del régimen de abonado y el riego ya os he hablado en otras entradas sobre ullastres. Si vamos a realizar muchas intervenciones, sobre todo varios defoliados al año, hay que mantener a la planta bien nutrida.
 
 Estos crecimientos fueron de nuevo alambrados y defoliados en abril:
Y para el mes de agosto había formado gran cantidad de ramas:
 Este trabajo lo realicé el 24 de agosto, y era el segundo del año:
Para noviembre hubo de realizar un pequeño pinzado con tijeras:
 Otro mes de febrero, ya del 2012, con los ullastres despertando, momento defoliar, y alambrar para ir definiendo mejor la copa. Observar como manteniendo cortas las ramas del ápice y dejando crecer el brote que os mostré, el grosor de la primera rama es el mayor de todas las presentes en el árbol:
 Y la respuesta del ullastre en abril de 2012:
 La parte apical del árbol y la macetita que me sirvió para acodar. Sobre todo destaca la gran raíz ramificada que sale de la vena viva:


Una pequeña kurama de María José González y un primer modelado. Mi amigo José Carlos Castro es ahora su propietario.

 Y llegamos a enero de este año. Hemos tenido un falso invierno, y muchas plantas están brotando, entre ellas los ullastres, así que he adelantado casi un mes mi calendario de trabajo. Como medida de seguridad, los ullastres trabajados y trasplantados pasan el resto del invierno "rarito" en el porche acristalado. Un defoliado completo para analizar al detalle la ramificación, un poco de alambre para ir corrigiendo algunas ramas y un trasplante a una maceta de bonsái que tenía disponible y le encajaba bien y a seguir densificando la copa. En el trasplante he disimulado aún más el nacimiento del tronco, ya no se ve la T invertida. He eliminado también algo de corteza muerta y al estudio a fotografiarlo: 




 
Tiene un tamaño apropiado para lucir en el tokonoma que me hizo mi amigo Rosendo. La acuarela es mía, copia de un kakeyiku japonés, y el montaje de Juan Toral. Me gusta como vamos avanzando en la asociación Menesteo, cada vez mas detallistas, je, je.
 

Y aquí tenéis la respuesta a la pregunta, el ullastre NINO, lo que se puede hacer con esto.


Un saludo, amigos y ex-amigos.

Juan Antonio Pérez.

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