El bonsai del sur pisa con fuerza

Soy asociacionista.

Desde siempre he pertenecido a diversas asociaciones.

Que yo recuerde he pertenecido a la Asociación Naturalista Mahimon, en Vélez Rubio-Vélez Blanco, a la Asociación Española de Ornitología, a la que aún pertenezco, y a otras asociaciones varias, pero últimamente mis actividades asociativas pasan por las que están relacionadas con el bonsái.

Actualmente soy Presidente de Honor de la Asociación Bonsái Carthago, de Cartagena, donde desde su creación allá por el año 2003 hasta que me marché a vivir al Puerto de Santa María, estuve colaborando con Erasmo García en levantar una afición que no estaba arraigada en nuestra ciudad. Esta fotografía fue de la reunión constitutiva. ¡Cuantos amigos! (Enrique, Erasmo, Juan Ortega, Juan Sánchez, Paco, Javi y Ángel)

Cuando llegué a la provincia de Cádiz, y antes de aterrizar, como aquel que dice, ya estaba consultando en Internet que asociaciones de bonsái había por la zona. La primera en la que me fijé, por la proximidad y cierta nostalgia, ya que hice mi campamento de IMEC en Camposoto, fué la Asociación Bonsái el Taray, de San Fernando, a la que me acerqué y donde fuí recibido estupendamente por los socios que acudían regularmente a las reuniones.

A muchos de los socios aún no los conozco, ya que hemos pasado una mala racha y ciertamente la asociación estaba decayendo.

Recuerdo con cariño la primera exposición a la que acudí y que fué realmente la segunda exposición en la que llevé árboles, la primera fué unos pocos días antes en Jerez, con la Asociación El Pinsapo.

De ese año (2006) recuerdo al anterior presidente, Joaquín, que actualmente nos tiene un poco abandonados, a los amigos que he encontrado allí (llegamos casi a la vez a la asociación Jose Ugido, José Luis Cardoso, el actual presidente, y Carlos), a Carlos Bejar, Paco Outón, Gonzalo Delgado, Pepe Medina, Jose Carlos García Navas, Manolo Vázquez, Pepe Linares, José Ginés, ..... y un largo etcétera de buenos amigos que he encontrado allí.

Creo que desde que me asocié al Taray mi actividad bonsaística ha ido creciendo exponencialmente, tanto a nivel asociación, como a nivel personal, y son incontables ya los eventos a los que he acudido, y que hasta esta fecha no me habían enganchado. Como muestra este grato recuerdo del magnífico Congreso Nacional celebrado en Benalmádena:

Una gran alegría que me he llevado este año 2008 es ver como en mi tierra natal, Almería, se ha creado una nueva asociación, Bonsái Oriente, donde un grupo de buenos amigos, entre los que destaco a Gabi Cruz, Manolo Porras, Jesús Cuevas, Martinako y otro buen grupito de almerienses, con muchas ganas, están potenciando esta afición en mi patria chica.

Desde el principio me quise adherir al proyecto recién nacido haciéndome socio. Una de las exitosas actividades en la que ha colaborado en tan corta trayectoria esta joven asociación ha sido el curso de otoño de la Universidad de Almería "El arte del bonsái: Cultivo y tradición", donde participamos varios asociados como ponentes.

Hace más de año y medio que conocí a otro buen grupo de amigos, de los que os he hablado ya en este blog, la mayoría de Chipiona, y con los que casi cada 15 días me reúno para hacer lo que nos gusta, trabajar árboles.

Fernando Veas es el alma del grupo y el que cede una nave de su empresa familiar para que nos reunamos. Domingo, Enrique, Raúl, José Francisco y otros pocos más han entrado en mi vida y en mi círculo de amistades. Realmente disfruto con ellos haciendo algo que me tiene realmente enganchado, BONSÁI.

Estaba preocupado porque sabía que donde había fijado mi residencia había muchos aficionados al bonsái. Muchos habían pasado por mi casa (Raúl, Rosendo, Salva) y a otros los fuí conociendo después (Antonio, Juan, José Manuel Salmerón, Juan Carbú, y otros cuantos más. También sabía de la existencia de una asociación dedicada al bonsái con mucha actividad en el pasado, pero que llevaba casi dos años en el dique seco.

Unos pocos nos decidimos a reactivar la asociación, aunque finalmente optamos por refundarla, y desde hace unos meses nos venimos reuniendo cada 15 días. En esta fotografía queda registrada la reunión inicial que puso en marcha este proyecto.

Lo del título de este artículo tiene que ver con el acelerón que desde mi punto de vista está pegando el asociacionismo relacionado con el bonsái en el Sur. Hay muchas asociaciones veteranas que llevan muchísimos años funcionando por aquí abajo, y quiero nombrar aquellas a las que me une una amistad especial con algunos de sus socios.

Para mí, la primera, pues fué hace 20 años cuando contacté por primera vez con el mundo del bonsái, es la Asociacíón Amigos del Bonsái de Arroyo de la Miel, en Málaga. Creo que fué su primera exposición, si no recuerdo mal, y para mí fué toda una novedad que no sabía entonces lo que iba a suponer en mi vida. Miguel Ángel González tiene gran parte de la culpa de ello, y hace una gran labor, junto con el resto de los asociados, por difundir este arte, así como otros afines (Suiseki, Ikebana) entre los malagueños.

La segunda que quiero nombrar es la Asociación Amigos del Bonsái de Granada, donde Jorge Stampa está a la cabeza de una asociación donde he ido conociendo a gran número de estupendas personas, a los que actualmente considero amigos: Miguel, Emilio, ...y perdonad que no os nombre a todos.

Da gusto pasar por Granada en el Corpus, primero porque me retrotrae a mi etapa de estudiante universitario, y segundo, porque las exposiciones que organizan son muy atractivas, no solo por el bonsái, sino también por lo acogedor del carácter de sus asociados.

La tercera, a la que me une una relación especial es la Asociación Amigos del Bonsái Costa Tropical de Almuñecar. Jose Antonio Joya, su presidente, Antoñillo, Antonio Cabello, Nacho Salar, y un montón más, incluyendo a María Dolores, una gran aficionada y mujer de Jose Antonio.

Parece que es casualidad, pero seguro que lo del nombre "Amigos ..." no se lo pusieron por casualidad estas asociaciones, tengo muchos de ellos en cada una.

Algo que me ha alegrado mucho recientemente ha sido la noticia de la próxima inauguración el Museo de Bonsai de esta localidad, dirigido por José Antonio, y que comenzará su andadura el próximo 19 de diciembre. Ni que decir tiene que todos los del sur esperamos con ilusión el próximo Congreso Nacional que organiza dicha asociación, y que tendrá lugar del 2 al 4 de octubre del próximo año.

Por último, y sin que las restantes, y hay muchas, como la Cordobesa, que recientemente ha organizado exitosamente el Congreso Nacional de este año, o la más joven, casi recién nacida, Asociación Jienense de Bonsái, me gustaría nombrar a la Asociación Bonsái el Pinsapo, de Jerez, donde Luis Benítez, su actual presidente, y otros muchos asociados (Juan Carlos, Enrique, Fernando, José María, José Luis,.....) siempre me han recibido muy amistosamente, invitándome en dos ocasiones a presentar árboles en sus exposiciones.

Si os habéis leido el artículo hasta este punto, os habréis dado cuenta que además de árboles, de lo que más estoy hablando es de personas. Como decimos muchos en este mundo del bonsái, el árbol es la excusa para juntarnos un grupo de amigos a charlar de nuestras cosas y a intentar pasarlo bien. Para mí, desde que salí de Cartagena, el bonsái ha sido el vehículo que me ha permitido conocer a un montón de personas inolvidables a las que ya considero MIS AMIGOS.

Para cerrar este artículo, que ya se está alargando en demasía, os invito a conocer muchas de estas personas en un portal que poco a poco se ha ido abriendo camino en los corazones de muchos de nosotros: BONSAISUR. Si realmente queréis hacer amigos nuevos, buscar el link en la barra lateral, seguro que no os sentís defraudados.

Un saludo, AMIGOS.

Juan Antonio.