Hola amigos.
Pues ya va siendo hora de cerrar este capítulo, y esperar al próximo.
Me quedan algunos momentos que compartir con vosotros. Momentos que permanecerán en el recuerdo hasta la próxima ocasión, pero que disfrutamos una y otra vez cuando observamos las imágenes que dan fe de los mismos.
El momento de la preparación del viaje.
El viaje. En esta ocasión en solitario, observando como las irregularidades de la carretera movían las ramas de la Gárgola hasta el punto de tener que aflojar la marcha. Momento de "acojone".
Mometos de disfrute, y de sufrimiento, de un Barça-Madrid entre amigos. Algunos sufrían más que otros, aunque la cosa acabó en tablas.
Momentos de charla antes de la inauguración con viejos amigos.
Momentos de nerviosismo antes de entrar en la exposición.
Momentos de silencio escuchando al anfitrión.
Momentos de emoción al escuchar las palabras de Luis y contemplar a la Gárgola en el marco incomparable del museo, todo un honor.
Momentos de nerviosismo cuando te pide que cuentes su historia, y mira que uno está acostumbrado a hablar en público. Pero hay cosas que siempre impresionan.
Momentos de escuchar a los grandes del bonsai que vemos ganar una y otra vez los concursos internacionales. Un honor estar allí.
Momento de contemplación y disfrute al ir avanzando por la exposición.
Momentos de alegría por volver a estar junto a un gran amigo y mi mentor en el trabajo con los ullastres. Un honor compartir espacio con él en el museo.
Momentos de alegria compartida con mis alumnos, faltaban algunos, a los que echamos mucho de menos, algunos muy sentidos, pero los llevábamos en el corazón. En broma les dije que estaba el abuelo, el padre y los hijos. Ellos saben que la impronta de Erasmo les llega de alguna manera.
Momentos de diversión en la cena de gala, y en esta ocasión sin nerviosismo ante la entrega de premios. ¡Todos estábamos premiados!.
Momentos con premio!.
Mi "momento japonés".
Y momento de disfrutar de una buena cena en compañía de los amigos.
Y como no, un poquito de buena onda tomandonos unos gin-tonics en un local de moda. Momento bailón.
Y no debe faltar, estando por Madrid, un momento de cabreo por esos atascos que uno no sabe como se han generado.
En fin, momentos vividos que nos hacen pensar en lo verdaderamente importante y que nos incentivan a seguir en la línea que llevamos en esto del bonsái.
Un saludo.
Juan Antonio Pérez.
2 comentarios:
Desde 2012 andaba con las ganas de asistir a este evento bianual, y como bien dicen... a la tercera vino la vencida.
Regresé a tierras Gaditanas con buen sabor de boca y con algo muy importante... un chute de ganas por seguir aprendiendo y creciendo en este arte.
Cada vez que veo las fotos, me hacen viajar a cada momento que disfrutamos juntos los miembros que pudimos asistir de la escuela Carthago.
Muy buenos recuerdos, que espero poder revivir de nuevo sobre todo contigo Juan Antonio. ;)(El bailoteo, los Gin-tonics y nuestros cachondeos, son necesarios).
Un abrazo, y bonito reportaje final.
Seguro, José Carlos!
Hay que seguir avanzando!
Un abrazo.
Publicar un comentario