Hoy os voy a mostrar como un pequeño cambio en un árbol puede hacer que nos fijemos en la belleza escondida de un ullastre.
Ví por primera vez este ullastre de Erasmo García en las I jornadas de bonsái de la asociación Amigos del Bonsái Costa Tropical, de Almuñecar. Era un pequeño ullastre propiedad de Erasmo García que tenía en depósito mi amigo José Antonio Joya, y que sirvió para rellenar algunos espacios en la exposición que se celebró el primer fin de semana del año pasado.
Se trataba de un shohin en el que destacaba mucho el ten-jin que finalizaba un magnífico shari que comenzaba en la misma base del árbol. Por lo demás, la copa no estaba refinada y el tiesto no era muy llamativo. Incluso era similar a uno que yo había utilizado para una de mis durantas.
Para ser sincero, no me llamó excesivamente la atención. Esta era su imagen el día 2 de mayo: Sin embargo, cuando volví a verlo en casa de Erasmo, en Cartagena, no parecía el mismo árbol. Tan solo se había transplantado a un tiesto más bajo, en forma de moko, y se habían podado las ramas, aligerando la copa.
Decidí traermelo para un amigo del Puerto, pero finalmente no se decidió y opté por quedármelo para mi colección particular. Aquí os muestro algunas vistas del mismo tras alambrarlo un poco y posicionar las ramas principales. A mi me da la sensación de que el ullastre se inclina y saluda, de ahí el nombre italiano que le he buscado, Il saluto.
Esta es una vista de su dorso:
Desde el lateral se aprecia mejor el magnífico shari que termina en un ten-jin, muy texturizado y con muchísimos detalles, que tras limpiar con la pistola de agua a presión y aplicar polisulfuro se destacaron más:
Desde el lateral se aprecia mejor el magnífico shari que termina en un ten-jin, muy texturizado y con muchísimos detalles, que tras limpiar con la pistola de agua a presión y aplicar polisulfuro se destacaron más:
Y el frente tras el trabajo que le hice:
Hoy para presentarlo en el blog le he realizado esta fotografía de estudio. Ya comienza a mover los primeros brotes, a pesar de lo temprano de la estación, aún en invierno, pero es que casi no han parado de crecer los ullastres con el clima tan agradable que se disfruta en el Puerto de Santa María, con muy pocos días en los que por la mañana nos acerquemos a los 0ºC.
Esta temporada me centraré en cerrar las masas de verde, pero mostrando los nacimientos de las ramas, no formando una copa demasiado recargada.
Realmente es un pequeño acebuche que me gusta cada día más, espero que a vosotros también os guste.
Juan Antonio.
5 comentarios:
La verdad que se le vé precioso.
Que suerte poder trabajarlo ;)
Jamás me cansaré de aprender, por lo menos de personas como usted, Maestro.
Enhorabuena por su enriquecimiento de la colección.
Saludos cordiales.
Gracias miasky, si que es una suerte poder trabajar material de calidad.
Tonecho, tutéame hombre, lo de maestro te lo agradezco, es lo que me dicen mis alumnos del instituto, pero en el bonsái solo soy un aficionado que ya lleva unos cuantos años y tengo más experiencia que otros. Maestros para mi son Erasmo y Kobayashi. Pero gracias de nuevo por tenerme esa consideración.
Un abrazo.
muy bonito la verdad, seguro llegará a ser un pequeño gran ullastre!!
saludos
Gracias AM, eso espero. Ya sabes que se le tiene más cariño a los árboles que llevas tiempo trabajando, aunque este, aunque lleva poco tiempo conmigo, cada vez me gusta más.
Un saludo
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